Cómo limpiar tu alfombra para reducir los efectos de la alergia y resfriados

La llegada de la primavera siempre pone en jaque la salud de alérgicos y asmáticos. Muchas veces los síntomas derivados de estas molestias pueden minimizarse e incluso evitarse con una correcta higiene y limpieza en el hogar. Uno de los principales focos de polvo, ácaros y bacterias dentro del hogar es la alfombra. Este textil amenaza de manera continua el bienestar de gran parte de la población (especialmente aquellos con problemas respiratorios o alergias). Hoy te vamos a contar cómo limpiar tu alfombra para reducir los efectos de las alergias y resfriados y así poder disfrutar de una primavera tranquila. ¡Toma nota!

¿Por qué la alfombra es el habitat perfecto para bacterias, virus y ácaros?

Con el tiempo, hemos llegado a la conclusión de que la alfombra es tan agradable para nosotros como para las bacterias, virus y ácaros. De la misma forma que los muebles y objetos de tu hogar acumulan polvo, la alfombra también lo hace. A esto hay que añadirle que es un objeto que se encuentra en el suelo, que pisamos o incluso nos tumbamos sobre él, es decir es un objeto que acumula más suciedad que otros en casa. Otro motivo más para ser caldo de cultivo de estos agentes es que se trata de un textil (uno que no cabe en la lavadora), por lo tanto no es tan fácil limpiarlo como una mesa o una estantería. Las circunstancias mencionadas convierten a la alfombra en un cúmulo perfecto de polvo y suciedad que sirven de alimento y hogar a los ácaros y bacterias.

Esta muy bien, pero quieres saber cómo limpiar tu alfombra ¿verdad?

A la hora de tener una alfombra deberás tener en cuenta que es muy importante llevar a cabo unos hábitos de limpieza para mantenerla en perfectas condiciones (no sólo físicas, si no también de salubridad) y así evitar los efectos de las alergias y resfriados innecesarios.

Aspirar

El mejor consejo que podemos darte para un mantenimiento de limpieza excelente es que no olvides aspirar tu alfombra. La rutina dependerá del uso que le des:

  • Si tienes mascotas: El pelo de tus mascotas va a provocar que irremediablemente tengas que aspirar más la alfombra. Lo ideal será que pases el aspirador cada dos días.
  • Si está en una zona de paso: ¿Te preguntas cómo limpiar tu alfombra si está en una zona transitada de forma habitual? La respuesta es mínimo 2 veces a la semana. Quizás te parezca exagerado, pero ten en cuenta la cantidad de veces que se pisa este textil y el cúmulo de suciedad que supone.
  • Si está en una zona de no paso: En este caso, debes aspirarla cuando quites el polvo, nuestro consejo es una vez la semana.

Ventilar

A la rutina de aspirado, deberás sumarle la de la ventilación. Cada 2 o 3 meses es adecuado que saques la alfombra a tomar el aire. Cuando lo hagas sacúdela e incluso dale golpes con una raqueta o similar, de esta forma conseguirás sacar las partículas de polvo incrustadas en el tejido.

Limpieza profesional

A estas rutinas de limpieza debemos sumarle la limpieza anual profesional de la alfombra. Este tipo de limpieza elimina el polvo y las manchas más persistentes. Además en muchas ocasiones incluye la desinfección del textil. Por este motivo, a pesar de que mucha gente espera al cambio de armario para encargar la limpieza de su alfombra, nosotros recomendamos a los alérgicos anticiparse a la época más tortuosa para ellos (la primavera). De esta manera acabarán con los ácaros antes de que llegue su peor temporada y disfrutarán de una estación más relajada.

Ahora ya sabes cómo limpiar tu alfombra para evitar los temidos síntomas de la primavera. Sólo te queda decidirte, ¿Quieres evitar los síntomas con una limpieza profesional?

 

Quiero limpiar mi alfombra